El mito: Teseo fue un héroe griego famoso por matar al Minotauro en el laberinto de Creta. Según cuenta el historiador Plutarco, después de esta hazaña, los atenienses conservaron el barco en el que Teseo había regresado de Creta como una especie de reliquia.
Con el paso del tiempo, las piezas del barco (maderas, cuerdas, velas, etc.) se fueron desgastando. Para mantenerlo en buen estado, los atenienses reemplazaban cada parte dañada por una nueva. Esto siguió ocurriendo durante muchos años, hasta que todas las partes originales del barco fueron reemplazadas.
El dilema filosófico: A partir del mito, surge la gran pregunta: ¿Sigue siendo el mismo barco de Teseo si ya no conserva ninguna de sus piezas originales? Y aún más: ¿Qué pasaría si alguien hubiera recogido todas las piezas viejas y las hubiera ensamblado para reconstruir el barco original? ¿Cuál de los dos sería el verdadero barco de Teseo? Este dilema se usa para discutir la identidad a lo largo del tiempo, y aparece en muchos contextos: desde debates sobre restauración de objetos hasta cuestiones más profundas como:
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¿Sigues siendo "tú mismo" si todas las células de tu cuerpo se renuevan con el tiempo?
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¿Un objeto es el mismo si lo reparás completamente, pieza por pieza?