En la mitología griega, Prometeo es definido como un titán destacado por su inteligencia y astucia. La Titanomaquia fue el enfrentamiento entre los titanes y los dioses olímpicos; en el cual Prometeo se puso del lado de los dioses (principalmente de Zeus) con tal de ganarse su confianza. La victoria de los dioses, Prometeo se volvió un cercano consejero de Zeus.
Tiempo despues, la atención de Prometeo se vio dirigida a que los humanos, creados y liderados por su hermano Epimeteo, vivían en condiciones precarias y sin los medios para sobrevivir. Por ende, decide robar el fuego de los dioses para entregarselo a los humanos, permitiéndoles avanzar en su desarrollo y mejorar su calidad de vida.
Zeus, al enterarse del robo y la traición para con él, encadenó a Prometeo a una roca en el Cáucaso, donde un ágila devoraba su hígado cada día; pero debido a su inmortalidad su hígado se regeneraba cada noche y así su suplicio continuaba. Además, Zeus castigó a los humanos enviándoles a Pandora, poseedora de una caja que contenía todos los males del mundo.
Interpretación del mito:
•La importancia de la desobediencia y la rebelión; Prometeo se presenta como la imagen de la desobediencia (aunque podríamos destacar sus decisiones en pos del progreso).
•Lucha entre autoridad divina y humanidad; ya que se demuestra la tensión y el desafío entre los dioses y los humanos (éstos últimos con intención de progresar y mejorar su situación).